Una nueva sobrina está en camino y nace en pleno invierno, así que le he preparado un saco de dormir bien calentito, con capucha y todo. El tamaño es de 6 a 9 meses para que lo pueda usar bastante tiempo, seguro que ahora le queda grande pero enseguida se lo podrá poner.
Ayer hice entrega y a los papás parece que les gusta, ¿a vosotros? 🙂
